La documentación en imágenes de nuestro paso por el Ars Electronica de este año ya está disponible en una colección de flickr, agrupada en sets cubriendo las distintas secciones del festival que visitamos:

[Ars Electronica 2008 >> mediateletipos.net photo documentation]

El festival Ars Electronica acaba oficialmente hoy martes día 9, aunque lamentablemente para mí acabó el domingo, día en que tuve que regresar a casa con el malsabor de haberme perdido una noche muy especial, Sonorous Embodiment, la gran gala-concierto del festival, que incluyó trabajos de Conlon Nancarrow, Elliott Carter, Alvin Currar, Edgar Varèse, Qin-Yi, Pamela Z y algunos más. La noche del lunes también tuvo lugar otro evento sonoro de interés, el concierto de los proyectos premiados en la categoría Digital Musics del festival (recordamos que este año el premio ha sido para el proyecto español reactable). [video de la reactable en ArsElectronica08]

Pero pensando en positivo, ahora toca continuar asimilando el chorro de información recibida y los proyectos descubiertos a lo largo de los cuatro días non-stop pasados en Linz. Asi que continúo con mi pequeña crónica del festival, retomando el viernes, lugar donde la dejé la semana pasada.

El dia comenzó con un intento de asistir a la mañana inaugural del symposium, aunque me perdí la introducción de su organizador principal, Joichi Ito, cuya intervención según me comentaron el combo JL de Vicente + Ruben Zemos98 fue de lo mejor del día. Estuve en la conferencia de Yochai Benkler (US), gran gurú muy conocido por su libro ‘The Wealth of Networks: How social production transforms markets and freedom’ (2006), y también en la del británico afincado en Berlin Tim Pritlove, que fue organizador principal entre 1998 y 2005 del Chaos Communication Congress y los Chaos Communication Camps, unos de los encuentors de hackers más importantes a nivel mundial.

La tarde fue dedicada a visitar CyberArts en el OK Museum, gran exposición del festival que muestra los proyectos seleccionados en las distintas categorías de los Prix Ars cada año. En proximos días dedicaremos algunos posts a reseñar algunos de los trabajos que más llamaron nuestra atención.

El viernes nos deparó una de cal y otra de arena, pues resulta que habíamos decidido reservar entrada para una de las dos sesiones con aforo limitado del concierto audiovisual de los austríacos Tosca (Richard Dorfmeister & Rupert Huber) junto a Fritz Fitzke (encargado del video), anunciado como la premiere mundial de su nuevo trabajo No Hassel. No esperabamos asistir al concierto de nuestras vidas, pues el estilo musical de este proyecto no se encuentra entre nuestras preferencias sonoras más marcadas actualmente, pero también es cierto que Huber y Dorfmeister fueron los responsables de Opera (1997) y Suzuki (2000), publicados en Studio !K7, dos discos considerados esenciales en la historia del downtempo más sofisticado, lánguido y con toques clásicos y que yo al menos guardo en mi memoria y colección discográfica pues formaron parte de la banda sonora de unos años en que justo estaba empezando a escudriñar la electrónica más alla del mainstream. Así que tras años sin escucharles de nuevo y reencontrarlos aquí como uno de los eventos destacados de este festival supuestamente dedicado a mostrar propuestas audaces y vanguardiastas, pues pensamos que habrían tenido una interesante evolución y por eso estaban aquí. Gran error, pues los tres señores ‘perpetraron’ un directo que en resumen no nos gustó un pelo, más bien todo lo contrario (al menos a un servidor y mis dos acompañantes… no doy nombres para evitar posibles represalias del trio, je). La música todavía hubiera tenido un pase como muzak de cocktail o sintonía para un programa de debate, pero ya la combinación con los visuales (un pastiche contínuo de tópicos y clichés con una estética new age y ostentosa), y el tener que estar allí sentados (el concierto tuvo lugar en una iglesia de la ciudad y como somos muy religiosos y educados, pues al final nos dio cosa abandonar antes de que acabara la celebración -segundo error-) durante casi hora y media nos dejó completamente K.O. por sobredosis de mermelada. En fin, sin dedicar mucho más tiempo a comentar el asunto, la verdad que entiendo que existan estas propuestas que algunos de paso llamarán ‘live cinema’, y no me hubiera sorprendido tanto encontrarla en las noches de verano de las fiestas populares de algún pueblo o ciudad o en algún acto de apertura de evento oficial sin mucha substancia en el que hubiera que meter algo ‘espectacular’ para entretener a los distinguidos asistentes, pero desde luego que no en el Ars Electronica. Después de esta experiencia, si me dicen ‘Tosca o muerte’, elijo lo segundo.

Para resarcirnos un poco nos pasamos esa misma noche (y de nuevo el sábado) por el barco del proyecto European Sound Delta (ya aparecido en estas paginas), que en su recorrido por el Danubio habían aparcado esta semana en un puente cercano a las principales localizaciones del festival. Allí tuvieron lugar algunas performances audiovisuales improvisadas a cargo de los artistas ‘de gira’ con el proyecto y algunos otros invitados, todo ello en un ambiente festivo y que nos sirvió para relajarnos un ratito [video1, video2]

El sábado por la tarde de nuevo asistí al symposium, en la que era su última sesión y que me interesaba especialmente. Esta jornada llevó por título algo así como ‘política y accion colectiva en una sociedad moderna abierta’, y en ella intervinieron Georgia Popplewell (TT), que habló de la plataforma de periodismo alternativo Global Voices Online (premiado en la categoría Digital Communities del festival) e Isaac Mao (CN), uno de los pioneros en el tema del blogging en China y artífice de diversas iniciativas y encuentros destinados a promover la libre información en ese pais. También intervinieron Elizabeth Stark (US), otra activista miembro de freeculture.org fundadora del grupo Harvard Free Culture y Jonathan Mcintosh (US), artista conocido por sus videos de remix político, así como por promover iniciativas dedicadas a difundir ese tipo de trabajos. Mcintosh mostro una selección de videos muy interesantes que podemos ver en una playlist de su cuenta en YouTube [ver videos].

En cuanto al symposium en general, sigue pendiente leer algunos de los artículos incluidos en el catálogo del festival y también lo que digan las críticas de voces más entendidas. Pero nosotros podemos opinar brevemente, y en esto coincido con mi compañero Enrique Tomás, con quien comentaba rápidamente el asunto este fin de semana, en la impresión general sobre el symposium de que quizá más que ser lugar para el debate, ha resultado sobre todo un foro abierto de caracter divulgativo sobre las variadas propuestas, ideas y trabajos que tratan desde enfoques muy diversos los temas relacionados con la propiedad intelectual y la libre distribución de la información y la cultura. Lo cual supongo que no es bueno ni malo, pues de hecho sigue siendo necesaria la difusión de estas ideas y la toma de conciencia a nivel global sobre los ‘modos de hacer’ alternativos basados en la colaboración, la libertad y el afan de compartir, pero siempre queda el tema de qué vias específicas construir y en que direcciones trabajar a nivel de los medios y la política para tender a canalizar estas preocupaciones hacia la gente y el día a día, e implementarlas en nuestras sociedades.

Sobre todo pienso en estas necesidades cuando recuerdo que creo que este mismo mes se vota en el Parlamento Europeo el paquete de medidas TELECOM para controlar el tráfico de datos en la Red, con las llamadas ‘enmiendas torpedo’, propuestas por el eurodiputado británico Malcolm Harbour, del Partido Conservador, que de ser aprobadas autorizarían la instalación de software espía para monitorizar nuestras conexiones a la red y seguir dando alas a las sociedades de gestión de derechos de autor en su afan de seguir perpetuando su negocio absurdo y la economía cultural basada en la escasez y el control que ridiculamente se empeñan en seguir justificando. [leer noticia de hace un par de días en El País].