Escribo rápidamente desde el Ars Electronica de Linz. Ayer, aún cansado por el largo viaje, opté por dedicarme a hacer un reconocimiento del terreno y visitar algunas de las exposiciones del festival en lugar pasar por el programa de conferencias del día, que llevaba por título ‘Interaction, Interactivity, Interactive Art’, y donde se discutió acerca de la ‘interactividad’, ese mágico ‘buzzword’ en la comunidad relacionada con el new media, y que incluyó una ponencia sobre arte interactivo y biología de Arjen Mulder (NL), ganador de este año del ‘Prix Ars Electronica Media.Art.Research Award’, un nuevo galardón del festival (es la segunda vez que se entrega), destinado a premiar las labores de investigación teórica en el campo del Media Art.
Visitamos las propuestas instaladas en el Ars Foyer, la zona ‘de paso’ más informal del festival, donde además de servir como zona de socialización y descanso, se presentan otros proyectos. Por ejemplo visitamos el stand dedicado al ‘Banco Común del Conocimiento’, un proyecto de nuestros amigos de Platoniq, que están por aquí presentandolo durante todos los días del festival, también visitamos el ‘openFrameworks Lab’, diseñado como un espacio multifuncional para presentaciones y centro de producción on-site dedicado a openFrameworks, novedosa herramienta (se trata de una librería de c++ opensource especialmente destinada a proyectos artísticos) que aúnque está en fase de pre-lanzamiento, ya esta cosechando exitos. Visitamos algunos otros stands repartidos por este espacio y también el espacio expositivo dedicado a los proyectos de la categoria Digital Communities de los premios del festival, a los que dedicaremos un próximo post.
Tras este primer vistazo a las propuestas alojadas en Brucknerhaus, la sede central del festival, fuimos al cercano Lentos Museum donde se exhibe una selección de trabajos seleccionados por la galería Kapelica de Ljubljana (Slovenia), bajo el título ‘Ecology of the Techno Mind’, dentro de la sección del festival ‘Featured Art Scene’. Biotecnología, exploración espacial y el uso de la tecnología en el campo de la medicina son algunos de los temas que tratan las obras seleccionadas.
Prosiguiendo con la visita a las exposiciones del festival, nos acercamos a la universidad de arte de la ciudad, que aloja la sección ‘Ars Electronica Campus’, con el título ‘Hybrid Ego. Towards A New Horizon of Hybrid Art’ y dedicada este año a mostrar el trabajo realizado en la Universidad de Tokyo, una de las mas prestigiosas instituciones educativas de Japón (y primera universidad del pais, fundada en 1877). Este es el primer año que el festival no invita a una academía de arte a realizar esta exhibición, sino a una institución más dedicada a las nuevas tecnologías pero con una cierta visión y aplicación artística. Y así, nos encontramos con varios proyectos y prototipos basados más en su dimensión técnica y estrictamente innovadora tecnológicamente, dedicados por ejemplo a la captación de movimiento, la robótica, el camuflaje óptico, la simulación 3D, realidad aumentada y el diseño de interfaces. Y sobre eso iban también los trabajos incluidos en la exposición ‘Art on the Move’, con trabajos del master ‘Interface Cultures’, también alojada en otro espacio cercano, la cual visitamos muy rápidamente.
Una necesaria parada técnica para descansar un poco y disfrutar de unos helados en la Hauptplatz así como del paisaje sonoro de esta concurrida plaza nos sirvió para hacer algo de tiempo hasta las 19:38, hora en la que comenzaba la primera tarde-noche dedicada a conciertos y performances del festival. No sin antes visitar un gran container instalado en esa misma plaza, donde se aloja un proyecto llamado basado en Open Source / Creative Commons dentro de la sección ‘Take Away – Data To Go’ al que también le dedicaremos otro post en estos días.
Pues si, a esa hora exactamente (19:38, momento de la puesta de sol por aquí) arrancaron los conciertos de ‘All Inclusive’, evento de apertura del Ars Electronica 08. Nos llevaron en bus de excursión hasta Pöstlingberg, un pequeño ‘monte’ de 539m y uno de los puntos de atracción turística por excelencia de la ciudad de Linz, de ahí en parte el título de este evento, haciendo referencia a los completisimos paquetes turísticos que nos ofrecen los tour-operadores. La verdad que las vistas de la ciudad y la puesta de sol desde el punto donde arrancó está programación (una pequeña terraza situada en esta colina) eran muy bonitas y los dos primeros conciertos (los italianos TEZ y Domenico Sciajno) encajaron muy bien con la localización elegida.
Tras ellos, nos movimos un poquito de lugar sin bajar de este pequeño monte y ya en un gran espacio cerrado (o afuera para los que preferían charlar y tomarse algo en un gran jardín habilitado para ello, quizá algunos más que los que estábamos dentro) se desarrolló el programa de eventos de la noche. Sentí bastante (así como que se agotaran las baterías de mi cámara, je) perderme casi la mitad de la actuación de Jan-Peter E.R Sonntag y N-solab, pues aunque no estoy muy familiarizado con este artista alemán al que fichamos con los tags ‘interesante’ y ‘pendiente de investigar’ en el pasado festival Tuned City, donde hizo una presentación de sus trabajos, lo poco que vimos de esta performance tenia buena pinta, con una aproximación científica y teatral en la que ataviados con batas de laboratorio, varios operadores interactuaban con bobinas electricas, cacharros vintage, una especie de pararrayos e incluso un pez. Ya investigaremos más para enterarnos de esta y otras propuestas del señor Sonntag.
Después vino la performance audiovisual titulada ‘Ten thousand Peacock Feathers in Foaming Acid’, de Evelina Domnitch (BY) y Dmitry gelfand (RU/US), en colaboracion con Bas vaan Koolwijz (encargado de realizar el software de sonificación utilizado). Habia ganas especiales de ver esto en directo tras perdernoslo en la pasada Transmediale (ver video) y conocer su proyecto (también lanzaron un DVD en Line, uno de mis sellos favoritos). Esta pareja de artistas se dedica a crear entornos de inmersion sensorial basados en una mezcla de investigaciones basadas en física, química y tecnología, con resultados muy interesantes. En esta performance un haz laser atraviesa pompas de jabón creando unas proyecciones realmente geniales, mientras un software de sonificación se encarga de poner banda sonora al asunto.
Después, de nuevo TEZ (IT/NL), que presentó su live audiovisual PV868. Esto ya lo vimos en Amsterdam durante Sonic Acts este mismo año, pero en esta ocasión las condiciones (esta noche el espacio fue grande y cómodo, con tres pantallas de gran formato para las proyeccciones) eran mucho más adecuadas para esta performance de 20min dirigida a obtener una estimulación multisensorial masiva, basada en campos de color parpadeantes y binaural beats en constante interferencia entre si.
TEZ dio paso a la sección dedicada al sello Raster-Noton, que arrancó con el austríaco Franz Pomassl, seguramente el elemento más histriónico, industrial y sorprendente de este ya casi podemos decir ‘archiconocido’ sello (no globalmente, pero si por casi cualquiera un poco interesado en propuestas musicales mínimamente audaces). Divertido y con un sonido chirriante, sucio y deslabazado (para los estandares de la música rítimica de este sello), realizó una performance divertida y muy potente. Para que se haga una idea quien no lo conozca, Pomassl en sus últimas performances se dedica a manipular conectores jack conectados al sistema del recinto pero no a ningun dispositivo generador de sonido (prueben a hacerlo), los cuales chupa, se mete en la nariz y otros orificios, entrechoca entre si y contra superficies metálicas, así como otras lindezas como hondear sus cacharros analógicos de (según parecen…) diseño propio o sus auriculares en el aire, al estilo de las películas western. Todo esto mientras corre de un lado para otro como un poseso, abandona y vuelve a entrar en el escenario, etc etc.
Tras esto Frank Bretschneider, que presentó su último trabajo ‘Rhythm’, haciendo de nuevo un directo de música visual impecable y contundente, en la más pura ya casi podemos decir ‘tradición’ de Raster-Noton. Le siguió su socio en Raster-Noton Olaf Bender, con su proyecto Byetone, aunque como ya les hemos visto unas cuantas veces en directo este año (están en todos los ‘saraos’), y el cansancio a esas horas hacia mella, pues nos fuimos a casa sin escucharle.
Hasta aquí la crónica del primer día del festival, me he dejado algunas cosas en el tintero y hay otras sobre las que publicaremos info en próximos posts. Hoy solo he asistido a parte del symposium del festival (que puede seguirse en directo por streaming) de la mañana, que está teniendo lugar mientras escribo esto, pero ya le prestaremos atención a través de la gente que no se lo está perdiendo.
UPDATE 09.09.08 [Ars Electronica 2008 – mediateletipos.net photo documentation]
Excelente crónica!