The Influencers es un festival de arte centrado en temas de guerrilla social y política que se celebra desde hace ya 7 años en el CCCB de Barcelona.
La edición de este año se centra fundamentalmente en tres ejes temáticos:
1 – Los personajes ficticios y los contra-espectáculos como forma de acción social y política.
2 – La posibilidad de acciones a gran escala, la industria de las redes sociales y la transformación de la cultura hacker en la segunda década del siglo XXI.
3 – Nuevas ideas radicadas en la cultura del DIY para vivir el espacio y la rutina urbanos como fenómenos extraños e insólitos.
Las protagonistas serán siete propuestas procedentes de diferentes lugares del mundo:
Jeff Stark (EE.UU.)
Editor de Nonsense NYC, la newsletter de referencia para el arte independiente y los eventos más extraños del underground de Nueva York. Ha dirigido numerosas intervenciones de calle y organizado proyectos de gran escala del colectivo Madagascar Institute. Es miembro de Dark Passage, organización que crea juegos colectivos en espacios urbanos insólitos. En 2010 se implicó en el proyecto Underbelly, que consistió en ocupar ilegalmente una estación de metro abandonada en Brooklyn. La operación desató una ola de curiosidad y abrió un debate sobre el arte, la ciudad y el control sobre el espacio público por parte de las autoridades.
Superbarrio (México)
Superbarrio fue en México un héroe de los de verdad, pero que adoptó forma de superhéroe para darle más visibilidad a sus acciones. Se convirtió en un apoyo para las causas sociales y con su participación directa en la vida política y social de la capital mexicana intentó influir en la toma de decisiones. Contó con el apoyo de intelectuales y parte de la izquierda nacional. Entre 1985 y 1995 tuvo miles de intervenciones y un papel muy activo en la vida mexicana. Los medios siguieron con detalles las acciones de este hombre disfrazado de héroe con capa que usaba una máscara de luchador en sus actividades como Superbarrio.
Suicide Machine (Holanda / Austria)
“¿Cansado de tus redes sociales? ¡Libérate y libera tus amigos con un suicidio 2.0!”. La Web2.0 Suicide Machine permitía borrar automáticamente todos nuestros perfiles de usuario, falsos amigos y alter-egos, Suicide Machine recibió cartas de las principales empresas que gestionan software de redes sociales, como por ejemplo Facebook, con amenazas de consecuencias legales por haber violado cláusulas del contrato de usuario, revelando así la ambigüedad de un espacio público que es en realidad un espacio privado donde un usuario no es dueño ni siquiera de sus propias imágenes o de su propio nombre. A principios de 2010 sus autores recibieron notificación de cese e interdicto.
Janez Janša (Eslovenia)
Janez Janša es el nombre del primer ministro de Eslovenia entre 2004 y 2008, pero también el de tres conocidos artistas eslovenos desde el verano del 2007, completando el trámite oficial del cambio de su identidad en el registro civil. Desde entonces todos sus trabajos, sus asuntos privados, sus vidas, van bajo ese nombre.
Cat Mazza (EE.UU.)
La artista y activista Cat Mazza es la fundadora de microRevolt. Este colectivo de “craftivistas” (del inglés craft = manualidades) desarrolla proyectos que combinan punto, ganchillo, máquinas de tejer y redes sociales para investigar y cuestionar laexplotación del trabajo en las maquilas, y en particular el trabajo femenino.
Chris Atkins (Reino Unido)
Atkins es el autor de increíbles engaños a la prensa inglesa, retratados en la película Starsuckers. Este artista investiga las verdaderas razones detrás de nuestra adicción a la fama y destapa los intereses de individuos y grandes empresas que de ellos sacan enormes beneficios económicos. Es el caso de la superestrella Bob Geldof, organizador de numerosos conciertos benéficos que, como muestra claramente Starsuckers, han sido utilizados en primer lugar como herramienta de propaganda de las propias estrellas. Las cartas de amenazas de Geldof están disponibles en la página web de Starsuckers.
Wafaa Bilal (Iraq / EE.UU.)
Con una infancia marcada por la presencia de Saddam Hussein, dos guerras, una sublevación sangrienta y un periodo de detención en caóticos campamentos de refugiados en Kuwait y Arabia Saudí, Bilal, ahora emigrado en Estados Unidos, utiliza su arte para que los que viven en zonas seguras tengan que enfrentarse con la realidad del conflicto. En 2007 realizó «Domestic Tension»: se encerró durante un mes en una habitación frente a un disparador de pelotas de tinta amarilla, controlado por usuarios anónimos a través de una página web. Sobre «Domestic Tension» ha publicado un libro, que lleva lo que debía ser el título original de la acción: Shoot An Iraqui. Su proyecto más reciente y todavía en curso prevé la implantación de una cámara en la nuca.
alguien hace algo para poner fin a esa tortura de los mensajes de facebook y facebook le amenaza, pues con la de emails que podrian ser considerados spam provenientes de facebook… Espero que siga funcionando el suicidio2.0 para que lo aproveche quien quiera