Acabo de descubrir que en YouTube existe una especie de género, pariente de esos vídeos de 10 horas de sonido de olas o lluvia, que en lugar de pretender relajarte pretende excitarte. Se trata de vídeos que constan exclusivamente de colores parpadeantes, sin sonido, pensados para amenizar las fiestas caseras.

Curiosamente, estos vídeos están en las antípodas de esos vídeos tranquilizadores de sonidos de agua, en los que normalmente solo hay sonido, no imágenes (si las hay suelen ser una o varias fotos fijas). Podríamos llegar a la conclusión de que es más fácil relajar a través de las orejas y excitar a través de los ojos, y aunque no sea del todo cierto, porque hay sonidos que te pueden sacar totalmente de quicio, creo que en esa afirmación hay cierta verdad.

También podríamos probar qué sensación nos provocaría poner al mismo tiempo uno de estos vídeos de colores estroboscópicos y uno de esos de sonidos del riachuelo de la montaña, igual llegamos a un extraño estado de somnolencia eléctrica…