Estaba viendo el último episodio de The Good Wife y de repente ha aparecido ese cacharro que sale en la foto. El invento es una especie de cinturón para embarazadas con altavoces para que el feto vaya escuchando música. Como es una serie «realista», me imaginé que la cosa debía existir de verdad y la busqué. Resulta que, efectivamente, es un invento para ponerle música al útero llamado Ritmo Pregnancy.

Existen teorías que dicen que es bueno estimular a los embriones con sonido y música, y además se supone que esto crea un vínculo con el bebé y ayuda a calmarlo. Ritmo Pregnancy pretende ser una solución sencilla; funciona tanto con reproductores MP3 como con un smartphone e incluye un sistema surround de cuatro altavoces.

Hace unas semanas, Pedro Jiménez publicaba un post sobre qué sonidos prefiere un bebé, y seguro que todos habéis escuchado más de una vez que a los bebés les gusta el ruido blanco. De hecho, se venden muchos discos con ese tipo de sonidos especialmente pensados para neonatos. En cualquier caso, esto de «instalarte» un equipo de sonido en la barriga me parece ya un poco exagerado, no quiero ni pensar qué pasaría si todas las embarazadas empezasen a hacer sodcasting con Chopin, o Estopa, qué sé yo… Porque claro, lo que sea que suene no lo escucha solo el feto, lo escucha todo aquel que esté presente.