El festival SENSXPERIMENT y Jose Antonio Sarmiento, miembro de mediateletipos.net, han editado la publicación ZAJ: Concierto de teatro musical . Xabier Erquizia lo cuenta muy bien en el blog del audiolab de arteleku, asi que reproducimos su post completo:
El festival SENSXPERIMENT en su reciente edición (del 3 al 26 de octubre, en Lucena-Córdoba) ha dedicado su programación a mostrar y analizar la obra de Ramón Barce, compositor y miembro en sus inicios de la ya extinta formación-movimiento ZAJ (1964-1996). Aunque ya se ha escrito y hablado mucho sobre ZAJ, cabe recordar, para los que no lo conozcan, que fue a España lo que fluxus supuso para el movimiento artístico norteamericano (perdón por la simplificación). Formado por Juan Hidalgo, Walter Marchetti, el mismo Barce y más tarde por Esther Ferrer, junto a un ir y venir de colaboradores, y fuertemente influenciados por el trabajo del binomio John Cage-David Tudor este grupo de artistas supuso un antes y un después para la música creada en España y en gran parte de Europa.
En esta ocasión hablamos de Zaj gracias al precioso y valioso documento que a raíz de la retrospectiva realizada por el festival cordobés acaba de publicar Sensxperiment. En realidad se trata de una versión extendida del documento-programa original del “Concierto de teatro musical” de Zaj, una de las primeras acciones propuestas por el grupo en 1964 y oficialmente el primer evento de “música en acción” conocida en la península.
La publicación, respetuosa y elegantemente reeditada por Jose Antonio Sarmiento, contiene además de los textos-partitura originales, varios artículos que contextualizan las acciones zaj en la gris y dictatorial españa de los 60. Muestra de ello son el “Texto para la censura previa” que obligaba a todo tipo de publicación o acción pública a justificar sus acciones ante el estado para que no chirriaran dentro de la limitada y censora visión franquista o la crónica escrita por Tomás Marco (tambien miembro eventual de Zaj) que nos cuenta la aceptación que tuvieron este tipo de propuestas en aquella sociedad. A todo esto se le añaden una cuantas fotografías que ilustran lo acontecido aquel 21 de noviembre de 1964. Cabe recordar que gran parte del documento ya se encuentra disponible online desde hace tiempo, hecho que no le resta ni un ápice de importancia a esta publicación, que rescata un documento clave de la historia artística del país. A fin de cuentas, una publicación que aunque obviamente resulta limitada para contar la intensa y extensa trayectoria de Zaj (tampoco es esa su intención) es indispensable para conocer mucho más de cerca su actividad.
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