Lo reconozco. Me gusta visitar espacios escondidos y ajenos cuando viajo, invadirlos con respeto pero con mucha curiosidad. Caminar entre enseres ajenos en los que podemos leer como lo hacemos en un libro. Allá cada quien con sus filias…
Esa sensación es la que tuve cuando visité la casa de Mario Praz, aunque aquí era fácil imaginar las historias que escondía cada uno de los más de mil objetos que pueblan las múltiples habitaciones de la vivienda, ya que el mismo las detalló en su libro La casa de la vida.
Recientemente se han llevado a cabo algunas movilizaciones para frenar el desmantelamiento de la casa del compositor francés Pierre Henry recientemente fallecido.
Algunos espacios son neutros pero en otros es difícil separar lo que allí queda de lo que allí ha pasado. Algo así sucede en las estancias de esta casa que Geir Egil Bergjord retrató hace unos años en su libro fotográfico titulado Pierre Henry´s house of sound y que puedes consultar aquí y aquí.
Leave a Reply
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.