Hoy publicamos los dos videos que documentan las dos obras creadas específicamente por María Salgado y Ixiar Rozas para la megafonía de la playa de la Concha en San Sebastián, dentro del programa de intervenciones del Observatorio de la Escucha para DSS2016EU. Ambas intervenciones fueron posibles gracias a muchas personas que hicieron realidad una idea, loca-loca-loca (repetir sucesivamente hasta el infinito). Tanto las locuras, como las corduras, son siempre actos corales.

Hoy, 21 de diciembre de 2016, es uno de esos momentos del año en los que el Sol alcanza su mayor o menor altura aparente en el cielo y la duración del día o de la noche son las máximas del año. Hoy comienza el invierno y nos parece una buena idea volver a la playa para recordar el verano. Hoy será la noche más larga y mañana los días serán más largos. Menos oscuridad, más luz.

Hay dos momentos en el año en el que el Sol alcanza la máxima declinación norte (+23º 27’) o sur (-23º 27’) con respecto al ecuador terrestre. Hoy es uno de esos momentos. Hoy es uno de esos solsticios, del latín solstitium, literalmente «Sol quieto». Hoy el «Sol está quieto». Hoy, repetimos: hoy declinamos.

En momentos como este, cabe recordar aquel verano, aquellas palabras, aquellas letras y granos de arena, aquellos momentos infinitos y llenos de extrañeza. Hoy cabe «recordar», del latín re-cordis, literalmente, «volver a pasar por el corazón». Recordar aquellas palabras no dichas, aquellas letras repetidas, aquellas guerras silenciadas y aquellas fiestas infinitas.

Recordemos que la arena, como el sonido, es infinita, es efímera. El tiempo se nos agota, algo se nos escapa, como la arena entre los dedos. Hoy cuando el Sol se ponga, un círculo se cerrará. Como un coro de arena, que canta en silencio, mientras la noche llega para marcharse ele, e, ene, te, a, eme, e, ene, te, e, o «l-e-n-t-a-m-e-n-t-e», como se quiera. Hoy es uno de esos días.