Martin Jay decía en Ojos abatidos que:

En general, los pensadores alemanes se han inclinado a privilegiar la experiencia auditiva sobre la visual, como lo indica su tendencia a abordar en su obra la poesía o la música antes que la pintura.

Martín Jay cae bastante mal en este libro con su manía de defender el oculocentrismo. Estamos casi seguros que ha sido él y su pandilla de becarios de Berkeley los que han atacado varias veces nuestra web. Pero en cualquier caso, ahí va otro buen ejemplo de esas maneras de entender políticamnete los sonidos y las imágnes. También va un buen ejemplo de cómo los tópicos sobre los nazis ya estaban creados antes de que terminase la guerra. Extiende, por ejemplo, el tópico del ciudadano inocente alienado por monstruos.