Texto de la comisaria (Carmen Pardo):
“Querámoslo o no, hay un puente entre la arquitectura y la música basado en nuestras estructuras mentales, que son las mismas tanto en la una como en la otra” (Iannis Xenakis). Por cuarto año consecutivo presentamos en La Casa Encendida un nuevo ciclo de conciertos y conferencias que, una vez más, ayude a comprender mejor, a percibir más intensamente los nuevos lenguajes de la música. El presente programa va a poner de manifiesto los múltiples puntos de encuentro entre arquitectura y música, entre espacio y tiempo, a través de lo que los griegos, Pitágoras en particular, entendieron de forma luminosa: el número.
Para los pitagóricos son los números los principales generadores del mundo y la causa de que éste sea captado por la inteligencia de manera que se pueda determinar su razón y proporción. Únicamente a través de ellos y de su transformación sensible en la música es posible hallar armonía y orden en el cosmos y exorcizar el primigenio caos; ese desorden siempre temible y amenazador que sólo puede ser conjurado en virtud del número y de la cualidad que éste posee de introducir un principio de razón en el universo. El concepto de “arquitectos de la música” se ha atribuido a innumerables compositores del pasado, desde Ockeghem a Bach, desde Brahms y Bruckner a Schönberg, pero alcanza su máxima evidencia con los tres autores que conforman nuestra presente propuesta: “Música de la arquitectura: Varèse/Xenakis/Dusapin”. Xavier Güell
Esta idea lo define bastante bien:
«La arquitectura es música petrificada, la música es arquitectura en movimiento» Goethe
muy bueno ese apunte!